“Lo peor está aún por venir” advierten los científicos sobre el clima

Clima vuelto loco

La reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero durante la pandemia de COVID-19 no ha frenado el rápido cambio climático. La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera se mantiene en niveles récord y el planeta continúa calentándose, acercando implacablemente a la humanidad al desastre. Estas son las conclusiones del nuevo informe interinstitucional United in Science 2021.

Según el secretario general de la ONU, António Guterres, hemos llegado a un “punto de inflexión”. “Las consecuencias destructivas para el clima y para el planeta ya son mucho más graves de lo que pensábamos, y el cambio climático está ocurriendo más rápido de lo esperado”. 

Se considera como “un comienzo”

El aumento de las temperaturas globales está alimentando eventos climáticos extremos destructivos en todo el mundo y, por lo tanto, aumentando su impacto en las economías y sociedades, según el informe. 

La temperatura global promedio durante los últimos cinco años ha estado entre las más altas registradas. Existe una probabilidad creciente de que en los próximos cinco años la temperatura aumente temporalmente en más de 1,5 ° Celsius; los científicos consideran esta cifra como un umbral aceptable, más allá del cual hay consecuencias catastróficas impredecibles. 

Los desastres climáticos son cada vez más severos

“Hoy, el número de desastres climáticos registrados es cinco veces mayor que en 1970, y cuestan siete veces más”, dijo el jefe de la ONU. “Los países más desarrollados también se encuentran entre las víctimas”. El Secretario General citó el ejemplo del reciente huracán Ida, que dejó a millones de Nueva Orleans sin electricidad, paralizó la vida en Nueva York y mató al menos a 50 personas. 

Según el jefe de la ONU, tales fenómenos no habrían ocurrido si no fuera por las actividades humanas que llevaron al cambio climático. “En todas partes vemos incendios, inundaciones y eventos naturales extremos, que ocurren con mayor frecuencia y causan enormes daños. Y esto es solo el comienzo, lo peor está por llegar”, advirtió António Guterres. 

“Todavía estamos muy atrasados ​​en el cronograma para lograr los objetivos del Acuerdo de París”, dijo el Secretario General de la ONU en el prólogo del informe. “Este año, las emisiones de combustibles fósiles han vuelto a sus niveles anteriores, las concentraciones de gases de efecto invernadero siguen aumentando y los factores antropogénicos están provocando fenómenos meteorológicos peligrosos que han afectado la salud, la vida y los medios de subsistencia de las personas en todos los continentes”.

La pandemia no fue de ayuda

El informe también señala que las reducciones en las emisiones de gases de efecto invernadero asociadas con la desaceleración de la actividad económica durante la pandemia fueron marginales y simplemente no pudieron frenar el imparable cambio climático. 

Los niveles de dióxido de carbono ya han alcanzado un récord. Además, no hay indicios de que nuestra recuperación avance de forma más sostenible: tras una disminución temporal, los volúmenes de emisiones de dióxido de carbono están volviendo inexorablemente a sus niveles anteriores.